Toda persona tiene defectos y virtudes y esto no debería sorprender a nadie. A menudo solemos idealizar a las personas y esto nos lleva a decepcionarnos una vez que las conocemos en su peor versión pero la realidad es que es necesario conocer lo bueno y lo malo de alguien para saber si es compatible con nosotros y para ello nada mejor que el zodiaco.

En el día de hoy vamos a profundizar en el conocimiento de un signo en particular pero nos enfocaremos en su parte más compleja: te contaremos por qué los tauro son complicados de llevar y hablaremos de sus peores rasgos.

Signo Tauro: Sus defectos

Ante todo vamos a dejar algo en claro: Tauro como el resto de los signos tiene cualidades maravillosas que lo hacen único tales como su tenacidad, su lealtad y su sentido del deber, solo por mencionar algunas. Pero como hemos adelantado, para conocer a alguien en profundidad necesitas saber lo bueno y lo malo y seguramente en la mayoría de los portales de Astrología solo encontrarás lo mejor de Tauro.

Para saber si tienes compatibilidad con un nativo del signo del Toro debes conocer los peores rasgos de Tauro y aquí te los detallaremos. Una vez que conozcas tanto lo bueno como lo malo del signo podrás sacar tus conclusiones y además podrás entablar con uno de sus nativos una relación mucho más auténtica y real, sin falsas expectativas.

Lo peor del signo Tauro

Se suele decir con mucha frecuencia que no es fácil lidiar con un Tauro y en honor a la verdad consideramos que es cierto. Esto no significa que los tauro sean malas personas, sino simplemente que su temperamento no es compatible con cualquier signo. Veamos entonces por qué se suele decir que Tauro es un signo difícil:

Estructurado: Si eres una persona a la que le gusta improvisar y odias la rutina, sencillamente no congeniarás con Tauro ya que los nativos de este signo necesitan tener todo organizado para no perder la calma. En general tiene minuciosamente organizado su día a día y lo que harán en su vejez seguramente también.

Obstinado: Entre lo peor de Tauro se encuentra sin dudas su obstinación y su rigidez a la hora de cambiar de opinión o escuchar sugerencias o puntos de vista diferentes al suyo. Si Tauro ha tomado una dirección o se ha encaprichado con una idea es muy difícil por no decir imposible, que cambie de opinión.

Celoso: En la naturaleza de todo nativo Tauro se encuentran los celos y es algo que no podrá evitar aunque quiera. Entre más le importe alguien, más celoso y posesivo será, y algo que para otra persona podría ser tonto a Tauro puede hacerle sufrir mucho. Así que si tu naturaleza es muy liberal y crees en el amor libre, definitivamente debes borrar de tu lista de posibilidades al signo del Toro.

Obsesivo: Un Tauro ante todo se centra en sus responsabilidades y si bien en rigor esto es una virtud, deja de serlo cuando lo lleva al extremo y no es capaz de relajarse. Algunas de sus obsesiones tienen que ver con la excelencia en el trabajo y el orden en el hogar, solo por mencionar algunas.